Moinam era un bebé saludable cuando nació hace 12 años por vía de cesárea. Cuando Moinam cumplía 5 meses, sus padres notaron que tenía una apariencia inusualmente pálida. Esto los alertó para llevarlo al hospital a hacerse chequeos y varios análisis de sangre. Desafortunadamente en un giro del destino, se le diagnosticó E-beta-talasemia a tan temprana edad.
Los padres de Moinam estaban devastados y se autoreprocharon por no haberlo examinado anteriormente para prevenir esta condición.
Si no se trata, la mayoría de los niños afectados por este trastorno no pueden vivir más allá de los 10 años. Moinam tuvo que someterse a transfusiones sanguíneas regulares y medicamentos para mantener su recuento de glóbulos rojos a un nivel normal.
Buscaron todas las formas posibles para tratar a su hijo y descubrieron que la única forma de curar a Moinam, era a través de un trasplante de células madre.
Aconsejados por el Dr. Asis Mukherjee, oncólogo de Moinam y médico de trasplante, decidieron probar el trasplante de células madre hematopoyéticas. El estudio de compatibilidad fue hecho en toda la familia, pero ninguno resultó perfecto.
Por lo tanto, decidieron intentar un segundo embarazo y almacenar la sangre del cordón umbilical del bebé con Cordlife India para el tratamiento de Moinam más tarde, al menos un año después de la recolección de sangre de cordón umbilical.
El Dr. Mukherjee, Director Médico del Instituto de Investigación del Cáncer Netaji Subhash Chandra Bose, explicó:
“Decidimos usar una mezcla de médula ósea y células de la sangre de cordón umbilical, ya que tiene mejores y más rápidas posibilidades de éxito que las células de la médula ósea”.
También añadió:
“Al usar sangre de cordón umbilical con médula ósea, se aumentó el número de células madre disponibles para la transfusión y se redujo la posibilidad de complicaciones. Este es el mejor tratamiento en tales casos, ya que puede conducir a una cura completa”.
La hermana de Moinam nació sana en 2009 y su crecimiento fue normal.
Lo más importante es que fue sometida a una prueba de talasemia. Por lo tanto, su sangre de cordón se almacenó con éxito y se preservó cuidadosamente.
Se encontró que la compatibilidad con Moinam era perfecta, afortunadamente. Esto dio una nueva esperanza para Moinam y su familia, ya que la tasa de éxito para la cura es mucho mayor emparejando estas células madre con una pequeña cantidad de médula ósea.
Ahora, a los 12 años, Moinam va a la escuela con regularidad y le está yendo muy bien. Además de eso, ha avanzado en aprender música clásica y pintura.
Aunque todavía necesita someterse a una transfusión de sangre, está recibiendo muchas menos transfusiones y terapias. Lo que significa que los tratamientos podrían suspenderse muy pronto.
Fuente: Parent’s Guide to Cord Blood
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